me miro en el espejo y me rasco las antenas,
después me doy cuenta de que ¡yo no tengo
antenas, me voy volando a la cocina y
mi madre me quería matar y yo ¡solo quería
comer!.
Me fui porque mi madre me iba a matar y
a mí como que no me daba la gana que me matase
mi propia madre. ¡Todo el mundo me quería
matar!. Hasta me caí en una caca de perro
¡buag!. La gente eran “psicópatas” (eso es
lo que decía mi primo porque no se fiaba de
nadie) ¡hasta me querían matar con patatas del
burger King!. Me fui a una curandera y me
dijo que tenia que bailar un baile sexy para
quitarme la maldición de la mariquita, lo
intenté y no pasó nada, en voz baja dije,
que asco de curandera.
De momento tenía que hacer ¡popo! y no
sabía dónde y me hice popo encima.
Después me di cuenta de que llegaba
tarde al colegio y mis compañeros me
querían matar como toda la gente, en fin,
todos me querían matar y unas moscas de
la clase intentaban ligar conmigo. ¡TODO
ERA UN FIASCO!.
me miro en el espejo y me rasco las antenas,
después me doy cuenta de que ¡yo no tengo
antenas, me voy volando a la cocina y
mi madre me quería matar y yo ¡solo quería
comer!.
Me fui porque mi madre me iba a matar y
a mí como que no me daba la gana que me matase
mi propia madre. ¡Todo el mundo me quería
matar!. Hasta me caí en una caca de perro
¡buag!. La gente eran “psicópatas” (eso es
lo que decía mi primo porque no se fiaba de
nadie) ¡hasta me querían matar con patatas del
burger King!. Me fui a una curandera y me
dijo que tenia que bailar un baile sexy para
quitarme la maldición de la mariquita, lo
intenté y no pasó nada, en voz baja dije,
que asco de curandera.
De momento tenía que hacer ¡popo! y no
sabía dónde y me hice popo encima.
Después me di cuenta de que llegaba
tarde al colegio y mis compañeros me
querían matar como toda la gente, en fin,
todos me querían matar y unas moscas de
la clase intentaban ligar conmigo. ¡TODO
ERA UN FIASCO!.