Todo empezó una mañana de domingo,
como siempre la vecina dando por saco
a las 6 am. Pero cuando me desperté…. ¡No
podía creerlo era una!.... ¿Mosca? – en serio
de todos los bichos que hay y me toca
ser este – fui a pedir ayuda a mi abuela
y a mi hermano especial. Dije – al fin
llegué – pasé entre la rejilla de la puerta del
Todo empezó una mañana de domingo,
como siempre la vecina dando por saco
a las 6 am. Pero cuando me desperté…. ¡No
podía creerlo era una!.... ¿Mosca? – en serio
de todos los bichos que hay y me toca
ser este – fui a pedir ayuda a mi abuela
y a mi hermano especial. Dije – al fin
llegué – pasé entre la rejilla de la puerta del
intenté explicárselo y al final se lo
creyeron pero no se fiaron mucho de mí
pues en mi casa hay más insecticidas que
comida. nos fuimos por allí, por
allá buscando la cura o antídoto o lo
que sea por todo el barrio hasta
que encontramos una casa destrozada
y antigua donde había un cartel que
ponía
“Propiedad de Gimi
el Cachondo”
la verdad nunca había oído a
nadie absolutamente nadie hablar de
un tal Gimi el cachondo, entramos
a investigar el moscardón y el dúo
mosca estaban acojonados porque
habían telas de arañas y donde hay
telarañas hay… y moscardón gritó
¡Araña! Era una tarántula
increíblemente grande vimos y frasco
de cristal que ponía “antídoto” lo
protegía la araña así que nos enfrentamos
contra ella ganamos y conseguí
el antídoto claro después, de eso
tuve aracnofobia.