solo un día, pero después de deberes nos ponían
un montón.
Mi día a día era muy divertido, ya que realizábamos
muchas actividades, como pasear, carreras,
juegos, etc…
Todas las noches pensaba cómo estarían mis padres
al ver que había desaparecido, pero poco
a poco me fui olvidando de ellos, los días con mis
amigos moscas eran los más divertidos ya que conocíamos
insectos nuevos como: Jordi el bicho bola, Jesús
la abeja, Adrián el ciempiés, y muchos más con los
que jugábamos y nos lo pasábamos bien.
Poco a poco nos fueron llegando cartas de que un hombre
iba a venir al lugar donde nos alojábamos las moscas.
Cada vez estábamos más nerviosos porque queríamos
ver de quién se trataba en esa carta.
Cuando llegó el día, vimos llegar a la puerta
una gran limusina negra, de la cual salían tres
personas, cuando tocaron la puerta, les abrimos y…
¡Era un brujo!
Estuvimos un rato hablando y nos dijo que nos
había puesto este hechizo para que aprendiéramos
a convivir con otras especies y también nos dijo
que el día siguiente cuando nos levantáramos estaríamos
en nuestras casas con nuestros respectivos cuerpos.
Documento:
12,14-15io43
etiqueta:
Aspectos Psicosociales - Ámbito temático - vida escolar