Una excusa muy peculiar.
-Hola profesora…
-Hola Javier, ¿Qué te pasa?
-Bueno…es que me ha pasado una cosa…
-Javier, no quiero excusas.
-Ya…lo que pasa es que esta vez es verdad.
-No me lo creo Javier, ¡Es la tercera vez en
esta semana que no me traes los deberes hechosa clase!
- ¿Y cómo sabe usted que es de los deberes
de lo que estamos hablando?
- ¿Es que acaso no se trata de eso?
-Sí… ¡Pero esta vez lo que me pasó es cierto!
-Supongo que no me quedará otra opción que
escuchar tu historia, pero recuerda que si no
me suena real tu excusa, te pongo un
negativo.
-Ya lo sé…Bueno, a lo que iba.
Un lunes cualquiera, mi madre fue a despertarme
a mi cuarto, Cuando fui a levantarme noté algo
peculiar en mis brazos, lo que pasaba era que
tenía más dedos y eran mucho más cortitos,
pero como aún estaba medio dormido pensé que
sería fruto de mi imaginación.
Cuando fui a bajarme de la cama… ¡cataplum!
Eso me despertó del todo, ya que el trompazo que
me pegué fue impresionantemente largo y doloroso
Después de la caída, casi me da un ataque al
corazón al verme reflejado en uno de los juguetes
de mi cuarto porque… ¡Era una oruga gorda,
verde moco y repulsiva! Intenté relajarme, pero fue
inútil, mi corazón latía a tres mil por segundo.
Lo único que me relajaba era que mis padres
Documento:
12,14-15sa35
etiqueta:
Aspectos Psicosociales - Ámbito temático - vida escolar