he querido vivir lo que se siente al revolotear por todas partes
y fastidiar a los humanos. ¡JE, JE, JE!
No sabía qué hacer, no sabía si tenía que buscar por internet
una escuela para estudiar, si molestar a los humanos o si
ir a tomar una cerveza con cacahuetes a un bar cualquiera
o irme a la discoteca.
¡Buff! Pensaba que convertirme en un insecto era fácil…
¡Pero no lo es! No sabía cómo comunicarme ni cómo relacionarme
con los demás insectos de esta gran ciudad Mosquilandia.
Había muchos insectos de mi especie que hablaban,
reían, jugaban y comían; nada tenía que ver con el mundo
de los humanos.
No sabía cómo comunicarme con ellos, porque apenas sabía
hablar en ese dichoso idioma. ¡Es como si fuera mudo!
Tampoco sabía cómo comunicarme con los humanos; mmsss,
mmsss… nada tiene sentido en esta vida. Estaba viendo
la televisión Bob esponja, cuando de repente se me vino
una idea a la cabeza. ¡Lo tengo! Ya se me había ocurrido
cómo comunicarme con los insectos y con los humanos. Con los
mosquitos a otros insectos tendría que hacer “mmsss” y hacer
los gestos. y con los humanos me comunicaría revoloteando de
un lugar a otro, saltar delante de sus narices, volar por
otros lugares, picarles, destrozándolo todo…
Cuando pensé esto noté que ya era de noche. A eso de las
00:30 revoloteé hasta mi cama, dejando marcas por toda
Documento:
12,14-15io34
etiqueta:
Aspectos Psicosociales - Estilos de humor - agresivo
he querido vivir lo que se siente al revolotear por todas partes
y fastidiar a los humanos. ¡JE, JE, JE!
No sabía qué hacer, no sabía si tenía que buscar por internet
una escuela para estudiar, si molestar a los humanos o si
ir a tomar una cerveza con cacahuetes a un bar cualquiera
o irme a la discoteca.
¡Buff! Pensaba que convertirme en un insecto era fácil…
¡Pero no lo es! No sabía cómo comunicarme ni cómo relacionarme
con los demás insectos de esta gran ciudad Mosquilandia.
Había muchos insectos de mi especie que hablaban,
reían, jugaban y comían; nada tenía que ver con el mundo
de los humanos.
No sabía cómo comunicarme con ellos, porque apenas sabía
hablar en ese dichoso idioma. ¡Es como si fuera mudo!
Tampoco sabía cómo comunicarme con los humanos; mmsss,
mmsss… nada tiene sentido en esta vida. Estaba viendo
la televisión Bob esponja, cuando de repente se me vino
una idea a la cabeza. ¡Lo tengo! Ya se me había ocurrido
cómo comunicarme con los insectos y con los humanos. Con los
mosquitos a otros insectos tendría que hacer “mmsss” y hacer
los gestos. y con los humanos me comunicaría revoloteando de
un lugar a otro, saltar delante de sus narices, volar por
otros lugares, picarles, destrozándolo todo…
Cuando pensé esto noté que ya era de noche. A eso de las
00:30 revoloteé hasta mi cama, dejando marcas por toda
Documento:
12,14-15io34
etiqueta:
Aspectos Psicosociales - Estilos de humor - agresivo